Al iniciarse por primera vez, Nexus carga una serie de iconos predefinidos, como un reloj analógico, una imagen que muestra el estado el clima en tu ciudad y dos gráficas con el consumo de memoria y procesador. El icono de Windows abre una versión simplificada del menú Inicio.
Añadir un programa o un documento a Nexus es tan fácil como arrastrar su icono hasta el dock: los demás se moverán automáticamente para dejarle espacio. Si activas las opciones pertinentes, Nexus convertirá en iconos las tareas abiertas, mostrando una miniatura cuando esté disponible.
Los efectos especiales de Nexus son impresionantes. Los iconos aumentan su tamaño, rebotan, se balancean o brillan a la vez que se ven reflejados en el fondo. Éste puede hacerse translúcido o líquido como una superficie de agua. Y los temas incluidos, aunque sean pocos, son de muy alta calidad.
Por increíble que parezca, el consumo de recursos de Nexus es muy bajo, por debajo de los veinte megabytes cuando todos los efectos están activados. Si a este rendimiento unimos la cantidad de opciones y el soporte para múltiples monitores, podemos decir con total tranquilidad que nos hallamos ante uno de los mejores docks para Windows
pinocho3113 |
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